Barriga, te odio y te amo.

¿Se puede odiar y amar a la vez?
Yo si puedo.
Barriga, te odio cada vez que me pongo mi ropa, cuando casi no puedo respirar con mis antiguos pantalones, cuando me pongo mis vestidos y te haces notar, cuando me pongo mis faldas, que no me cierran.
Barriga, te odio cuando me pongo en bikini, me haces parecer que aún estoy embarazada, que soy una embarazada eterna de 12 semanas.
Barriga, te odio cuando me siento y te siento.
Barriga, te odio porque no me haces sentir guapa.

Pero de repente Barriga, te amo. 
Te amo porque has creado a mis dos hijos.
Te amo porque los has llevado durante 9 meses a cada uno.
Te amo porque en el exterior eras nuestro punto de unión cuando la acariciaba.
Te amo porque me trasmitiste que había vida ahí dentro.
Te amo porque aún llevas los vestigios de mi maternidad, una cicatriz que llevaré toda mi vida y la línea alba que espero que tarde en desaparecer. 
Te amo porque de tí, han nacido dos vidas que son mi vida.


Te odio Barriga, pero más te amo.

Quizás a tí te pase igual, odies cada día a tu barriga pero a la vez la quieras infinito por éstas u otras razones, si te apetece cuéntamelas y si no, recuerda, que si quieres algún día puede menguar haciendo ejercicio, haciendo dieta, pero lo que nunca cambiará es que tu barriga es el milagro de la maternidad.

Comments

  1. Anónimo says:

    Como dice tu padre!!!siempre encuentras la felicidad a todo…… En fin terminar con ella es un poco trabajo y tiempo, pero la felicidad k te produce tus hijos es incomparable a nada

Cuéntame qué te ha parecido, me encanta leeros. ¡Gracias!