Mi tercer trimestre

El fin de mi embarazo vino por sorpresa, con una semana de antelación y como pensaba que no tendría tiempo para escribir este post, lo hice antes de que naciera mi pequeño corazón. Quiero contaros cómo fueron los últimos días de tener a mi niño dentro de mí.

Ésta ha sido mi evolución:

El tercer trimestre fue el más duro con respecto a molestias, éstas son las que he tenido y cómo las he solventado o al menos, lo he intentado :
  • Ciática o dolor lumbar : sea lo que sea se ha agravado con el aumento del volumen, el Yoga y la mantita eléctrica me ha ayudado pero he sucumbido a la faja lumbar para embarazadas. La empecé a usar todo el día pero lo considero un error, sólo para cuando voy a andar mucho ya que se me clavaba en el bajo vientre cuando estaba sentada y es incomodísima. (Tengo que reconocer que creo que me la han vendido una talla más pequeña y eso hace que me apriete, cuidado con este tema si pretendes comprar una).
  • Ardores: con Daniela no tuve, así que esta sensación es nueva para mí.  Y no tuve a pesar de lo peluda que nació, otra de los dichos sin sentido, «si tienes ardores es que el bebé tiene mucho pelo», FALSO, mi niña nació con melenón y no tuve ni un ardor.  Lo estoy mitigando con una respiración que me han enseñado en Yoga y regaliz porque no es habitual ni fuerte, pero si lo fuera el ginecólogo me ha recomendado usar medicina, en concreto ranitidina.
  • Insomnio: eran muy habituales la noches en vela, pero desde que me dieron la baja médica han disminuido casi el 80%. Con ésto me ha dado cuenta de cuán importante es la tranquilidad, por lo menos, en el tercer trimestre de embarazo. Tenía mucha presión en el trabajo y eso lo estaba notando, mi vida era un auténtico estrés. No dejéis de leer este artículo que os dejé ya por Facebook sobre la importancia de las emociones.
  • Dificultad al respirar: el útero va tomando un tamaño considerable y va desplazando todos los órganos y dejándoles menos espacio y por ello, esa sensación de ahogo al caminar y sobre todo al tumbarme boca arriba en la cama. Para caminar no hay ningún remedio pero si prefieres dormir boca arriba y comienzas a respirar con dificultad, yo he puesto unas almohadas debajo del colchón para inclinar un poco la postura y algo he mejorado.
El momento más feliz de estas semanas ha sido cuando fui al ginecólogo y descubrimos que el bebé se había dado la vuelta! Mi primer parto fue cesárea y con éste me gustaría poder intentar un parto vaginal si todo va bien. Te conté como lo hice aquí.
Los momentos más tiernos, uno de ellos ha sido haber podido preparar la maleta con mi niña, involucrarla en la llegada de su hermanito me parece fundamental y lo hemos hecho juntas estas vacaciones de Semana Santa.
El otro sin duda, el primer día de monitores y escuchar su corazoncito, al principio estaba muy tranquilito, parece que estaba cansado porque esa noche se había movido muchísimo, a pesar del súper desayuno que me metí para el cuerpo con chocolate como ingrediente principal, pero cuando le llegó el azúcar dijo, aquí estoy yo! Y no había quien lo parara.

Un momento divertido fue cuando la Profe de Daniela me enseñó un dibujo que había hecho sobre su familia, no pude parar de reírme al ver cómo también había dibujado al hermanito dentro de mi barriga. Fijaos, con zapatos y todo!
Momentos de miedo, cada noche al volver de hacer el pis nocturno, temiendo una rotura de bolsa como en mi anterior embarazo, situación que se volvió a repetir. Volví a romper la bolsa y ese fue el inicio del proceso de venida de mi niño al mundo.
Momentos divertidos, cuando mi chica me pintó la barrigota, justo la tarde antes lo volvimos a hacer, ella me dijo:

Mami, tengo una gran idea, qué te parece si nos pintamos la barriga?

Y yo pensé, ¿y por qué no? Con lo poco que nos queda entre nosotros… Ésta fue su última foto.
La verdad es que a pesar de los inconvenientes, del no dormir, de la pesadez, dolor de espalda, hoy la echo de menos, a ver! Estoy feliz con mi pequeño, que todo haya salido bien, que mi niño este sanito y junto a su familia, pero egoístamente, es tan bonito tenerlo dentro… Nunca será tan tuyo como durante el embarazo, esas sensaciones, sus movimientos, sus hipos, …, estar embarazada es una de las mejores experiencias que he podido vivir.

Cuéntame qué te ha parecido, me encanta leeros. ¡Gracias!