Mamá, ser o no ser, esa es la cuestión.

Este post va dedicado a mi amiga Marina y a todas las mujeres qué están planeando o por lo menos valorando la posibilidad de ser mamá.
 
Ser mamá o no ser mamá, esa era la cuestión…
Cuando estuve en esa encrucijada de mi vida, en una balanza mental, ponía en un lado las ganas de tener un bebé y en el otro lado ponía lo bien que me lo pasaba con mis amigos, cuando vine a Madrid viví una segunda juventud. Me encantaba salir, no dar explicaciones, no tener obligaciones ni ataduras, entiéndanme, yo avisaba a mi maridín de que llegaba más tarde y no tenía más problemas, sólo disfrutar.
Pero ese disfrute no era completo, no terminaba de llenarme, realmente en el fondo de mi ser, tenía otra necesidad, me estaba llamando la maternidad.
 
Fui yo quién decidió decir cuándo estaba preparada. Las mujeres caen o caemos en la tentación de sucumbir a los efectos de un convencimiento, en este sentido, el marido que pide hijos, la madre o la suegra que pide nietos, la gente que te pide hijos con esa pregunta odiosa «Y tú pa cuando?», tú y sólo tú debes ser la que decida cuándo estás preparada para ser madre.
 
La maternidad conlleva mucho sacrificio, sacrificio físico y mental, cansancio, agotamiento, dolor, incomodidades, noches en vela, pérdida de tu silueta, sea buena o mala… pero como dice la frase mítica de Fama, queréis ser madres? Pues ser madres cuesta. Y es por ello por la que debes estar 200% convencida del paso que vas a dar, porque… es para toda la vida y además en muchas ocasiones de desconcierto, de ignorancia no estará tu maridito, o tu madre, o tu suegra, o tu amiga  para resolverte la papeleta o simplemente animarte.
 
Parece que estoy siendo un poco dura y estoy poniendo la maternidad como algo malo, no, no, no, no lo entendáis así pero no es como salen en las revistas, es duro y hay que estar convencida. Aunque, tengo que deciros que hay un medicamento que es mano de santo, cura el sufrimiento, la soledad, el cansancio e incluso el dolor, una mirada o una sonrisa de tu bebé o simplemente mirarle y pensar, lo hice yo? Te llena de tal felicidad que vale la pena pasar por todos esos malos momentos.
 
Ser mamá o no ser mamá, esa es la cuestión, debes estar muy ilusionada con ello y… empieza a disfrutar!

Comments

  1. mamapuede says:

    No puedo estar mas de acuerdo!!
    Hay que estar convencida al 200%, y es duro, no es fácil renunciar a muchas cosas de las que hacías antes, peeeerooooo por otro lado es MARAVILLOSO!!!

  2. Cuánta razón tienes mamapuede!!
    Para mi la mejor decisión de mi vida!
    Besossssss

Cuéntame qué te ha parecido, me encanta leeros. ¡Gracias!