Destino vacaciones: Dublín

El pasado mes de mayo estuvimos toda la familia en Dublín visitando a unos amigos, fueron 4 fantásticos días en un país que a pesar de la lluvia, me encantó.
¿Por qué nos gustó tanto?
Porque está a 2 horas y media de Madrid y si compras los billetes de avión con tiempo, pueden encontrar vuelos baratos. Nosotros volamos con Aer Lingus, preferimos ésta a otra compañía lowcost y la verdad, que fue genial. 
Su primer viaje en avión

Dublín es una ciudad lo suficientemente grande/pequeña para visitar el centro en pocos días, puedes hacerte una escapadita de fin de semana o de un puente y visitar la ciudad perfectamente, andando y sin necesidad de grandes distancias.

Nosotros contratamos una visita guiada en español en Dublin.es y resultó una súper buena elección. Visitamos todo el centro andando mientras que la guía nos contaba toda la historia de Dublín.

Castillo de Dublin

Parque de la Laguna Negra

Catedral de Sant Patrick

Dublinia

Puertas de colores.

Cuenta la leyenda que un hombre llegó a su casa borracho y mató a su mujer y a su amante que estaban en la cama, cuando se dió cuenta que había matado a sus vecinos, la gente empezó a pintar de colores las puertas de sus casas para que las distinguieran.

Pintura en la fachada de edificio, reivindicando el Sí en el
referéndum de matrimonio homosexual.

Famoso Temple Bar

Trinity College

Molly Malone
Phoenix Park con más de 700ha de extensión

Phoenix Park con cervatillos

St Stephens Green Park
También visitamos la Fábrica Museo Guinness Storehouse, para los más cerveceros, visita obligada. Sorprendente el dato, este museo es el más visitado de Dublín… ejem.. No comments!! Jajajajaja.

Guinda muy atenta a la audioguía

La cerveza negra primero es marrón, hay que
esperar unos minutos para que se ponga negra.

Va por ustedes!

Porque a pesar del tiempo la gente vive muchísimo en la calle, nos sorprendió como estando en un parque en la zona infantil, comenzó a llover y la gente no se movía. Aquí en España habríamos corrido despavoridos a ponernos a cubierto, pero allí, los niños seguían tirándose por los toboganes sin miedo a mojarse y más sorprendente aún, las mamás ni inmutaron su conversación, seguían de charleta sin ni siquiera un «Niñoooooooooo, no te tires por ahí que te mojas!!!»

Comienza a llover y seguimos jugando, mimetizados!!!
Como veis, el parque estaba lleno de gente y lloviendo!!

Por la comida y/o bebida, siempre estamos dispuestos a probar nuevos sabores y aunque España está en mi ranking de países donde mejor se come, es necesario probar un Fish & Chips aunque sea una vez en tu vida.

Famoso Fish & Chip

Salchicas de limón!! me vuelvo loca!!!
Y sabían a limón, doy fe.

Porque la gente es encantadora, a pesar de que es difícil entenderles, dado su acento, aunque nosotros no es que tengamos un super inglés, pero intentan hacerse entender y te ayudan en lo necesario. Además, no podíamos imaginar que hubiera tanto español en Dublín, así que era como estar en casa!
Y sobre todo lo que más nos gustó de Irlanda, fue su filosofía de vida, se sale pronto del trabajo, incluso los comercios cierran pronto a excepción de los jueves/viernes en los que la gente aprovecha para hacer la compra y destinar el fin de semana a disfrutar de su ocio familiar, pasear, leer, arreglar sus jardines, …, fuera consumismo, fuera jornadas interminables de trabajo, cenas en familia a una hora prudente y a la cama tempranito.
Es un país muy enfocado a la familia, en cada restaurante por pequeño que fuera tenía su menú para niños, trona (por supuesto!) y lo primero que le llevaban a los niños junto con la carta era una caja de colores y una hojita para colorear. Detallazo, no creeis? Tan barato y tan raro de ver en nuestro país… Si cada bar, tienda, no sé, cada establecimiento empatizara con los clientes que le van a visitar, muchas cosas cambiarían.
Lo mejor de este viaje, a parte de la comida, la bebida, los monumentos, los paisajes, …, fue sin duda poder ver a nuestros amigos Ainoa, Nico y a su hija Lucía, que hicieron de magníficos anfitriones, llevándonos a sitios que seguramente nosotros no hubiéramos ido, contándonos historias que seguramente no hubiéramos sabido y disfrutando de momentos que si hubiéramos ido sólo nosotros tres no hubiéramos vivido. Gracias a los tres por hacernos este viaje si cabe aún mejor, gracias por acogernos y enseñarnos Dublín. Fue un placer.

Playa de Bray
En el puerto de Howth

Y vosotros, si no tenéis amigos como nosotros en Dublín, no descartarlo como destino vacaciones, mejor en primavera o verano, ya que el invierno es duro, aunque como dice uno de los dibujos más famosos de los souvenirs irlandeses, así son las estaciones del año en Irlanda.

Los irlandeses dicen que en un mismo día puedes tener las cuatro estaciones del año, así que si os frena la lluvia, que no sea un inconveniente, porque, no sería un auténtico viaje a Irlanda sin su lluvia, no os parece??
En nuestra casa tenemos una tradición familiar, lugar que visitamos, lugar de donde nos traemos un imán para la nevera, el de Dublín lo compramos en la famosa tienda Carrolls.
¿A que ahora os apetece más visitar esta ciudad? 😉

Comments

  1. Guapos!!!!

  2. Nosotros también viajamos de Madrid a Boston en esa aerolínea, muy recomendable!

    Un abrazo!

  3. Pues sí que apetece, muy bonitas las fotos, y muy curiosa la historia del hombre borracho, pobres vecinos!!! Un beso!

Cuéntame qué te ha parecido, me encanta leeros. ¡Gracias!